last day

Hoy miércoles, es el último día.
Último día de la semana. ÚLTIMO día que me levanto con cara de orto. Lo prometo.

Pero sí, me levanto con cara de orto.
Porque tengo que viajar en subte, tengo que ir a un organismo público a buscar los papeles de mi auto y de ahí tengo que ir a mi trabajo donde SEGURO ya se lastraron todas las facturas. TODAS.

Pero niños! A disfrutar que es el último día. Vamos que se viene un finde de 4 días, para sonreír, manosear, beber y dar palmadas y estrechones cómplices. Qué buenos fines de semana eternos donde se produce un adorable equilibrio entre salud mental y desgaste físico.

Yo voy a colmarlo de relaciones sociales. De esas que me alegran el corazón. Sin ir más lejos ya tuve propuestas de lo más mágicas que pueden haber.

Propuestas dulces.
Propuestas elitistas.
Propuestas compinches.

Mi viejo, sin ir más lejos me escribió hoy este mensaje: "Cuándo nos vamos a tomar una fresca?". ESO, es haber logrado un vínculo con mi padre. Que me invite a tomar una cerveza y que le llame fresca, es sin dudas un vínculo más estrecho. Algo que logramos en medio de la selva africana, rodeados de leones, rinocerontes, cocodrilos y majules. Oh! Los majules africanos tienen más rulos y son 10 veces más pelotudos.

Y hundidos entre la maleza, luego de que se hayan comido a Tomasa (nuestra guía) y al resto de los turistas, mi padre y yo quedamos tirados sobre la tierra mojada mientras oscurecía. Algunas gotas empezaron a caer sobre las hojas y luego sobre nosotros. A lo lejos podíamos escuchar algunos gritos de simios, insectos gigantes sobrevolando el área y de vez en cuando la alarma de un auto. SIEMPRE en todo el mundo, se oye en algún momento la alarma de un auto.

Mi viejo me dijo:
- Bueno hijito, parece que este es el fin. Alguno de esos animales va a comernos y ese hijo de mil puta nunca va a apagar la alarma de su auto.
- Seguro que la desconoce. Vos sabés cómo suena la tuya?
- No. Quizás alguna vez sonó pero yo la negué para no hacerme mala sangre.
- Seh, yo pienso igual. Total, si es el tuyo y hay tres negros desmantelándolo qué vas hacer?
- Nada. Supongo que subo a casa y llamo a la policía.
- Yo siempre pensé en bajar con un bate y gritar "EH! Es mi auto ese!" Sin salir de la puerta vidriada.
- Claro. Pasa que desde adentro capaz no te oyen. Abrís un toque, y sacas la boca por la rendija "Eh! Loco! Es mi auto!"
- Ellos saben que es TU auto. Saben que no es de ellos, quizás debas tirar una amenaza.
- Ah... como ser "Eh! Salgan de mi auto que los voy a cagar a trompadas".
- Claro, pero si te ven y se acuerdan de vos, al otro día te cagan a trompadas a vos.
- Entonces les grito y me escondo después.
- Y que queden con la duda de si no fue su propia mente. Su inconsciente que los invita a hacer las cosas bien. Pero para eso tenés que omitir el "Negro de mierda".
- Sí. Bueno. Vamos?
- Dale, vamos.

Y salimos de los arbustos donde estábamos meando. Subimos al jeep y continuamos el tour mirando animales y uniendo el lazo padre-hijo.

Disfruten. Yo me voy a dedicar a eso este finde.

Comentarios

Lord Cheseline ha dicho que…
El lazo de padre e hijo no se completa hasta que no vas a un puterío con tu viejo.
La Coca ha dicho que…
Yo me voy a hacer lo propio con mi madre a Villa General Belgrano. El problema, claro está, es que ella no toma cerveza y le molesta que yo beba.
Me parece que lo voy a invitar a mi padre. Si se la aguantó 30 años, qué le hace un fin de semana más.
sofía ha dicho que…
Excelso fin de semana se viene!

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