La bola en MÍ ingle...

El martes fui a jugar al tenis y me comí un pelotazo en el pedazo.
La mejor forma es decirlo, es de una.

Todavía lo tengo presente, creo que para siempre estará en mi mente.

Entré a la cancha temprano. Lo cual me dio lugar para hacerlo lentamente, con cara de despreocupado pateando piedritas. Raqueta colgada en la espalda con cinta a través del pecho.

Los jugadores restantes llegan. Es tenis dobles. Mi compañero y yo vamos perdiendo, pero mejorando progresivamente nuestro juego.

En una bola cruzada, salgo de mi posición corriendo a la red (es mi oportunidad). Agitando mi raqueta hacia un costado, veo cómo veloz se acerca mi contrincante a la red de su lado. Visualiza la pelota y me mira a mí (que tengo cara de "en qué estás pensando?!?!"). Se pone de costado y conecta con fuerza de revés hacia abajo.

De aquí en más, cámara lenta.

Gira sobre su propio eje el demonio amarillo y blanco. Cruza la red fuera de foco, por ahora sólo puedo ver los enrojecidos ojos de mi asesino personal y su sonrisa con todos sus malditos dientes brillando. Corro un pie a lo Maicol y quiebro cadera. Aleteo con mi raqueta. La esfera del mal cada vez más cerca y el golpe final: Salto hacia un costado. Hacia el costado que viene. Más cerca. Me roza la bragueta...Ahora imágenes de mi vida por mi mente: Mi mamá leyéndome cuentos de duendes. Mi papá me regala una bicicleta. Me sumerjo en la primer ola de mi vida. Me vuelo un diente con una puerta y lloro. Una nena me sonríe en el subte. Chocotorta para mi cumpleaños. Me hago el rana con un compañero del cole y él se caga haciéndome zafar de una golpiza. Mi primer porla con Natalia Oreiro. Mi mejor sapito con una piedrita. Me vuelco jugo en medio de una reunión en el trabajo. Me como un sánguch con Mayoliva.... Me despierto abrazado a un peluche.

IMPACTO.

Todo se vuelve negro... gris.... blanco....

Me imagino corriendo por una pradera juntando margaritas con dorados cabellos, cantando baladas que hablan del abecedario. Giro sobre mí mismo y puedo respirar, puedo volar... pero QUÉ CARAJO! SOY LA NOVICIA REBELDE!!! Miro mi entrepierna y encuentro la respuesta: No hay nada.


Abro mis ojos y tengo a mis co-equipers a mi alrededor con las manos en la cintura. Con lágrimas en mis mejillas, aferrado a mi entrepierna hecho una pelotita humana y aún con los ojos entrecerrados alcanzo a susurrar: "Creo que me voló la poronga.... Ahg.... Ayúdenme a buscarla."