Demonio de raza
Ese soy yo, una bestia demoníaca. Pero no en cualquier situación, en una en particular. Quisiera decir que lo soy en la cama, pero no. Aunque sí que le pongo huevo, eh? Huevo y poronga, claro.
No. Me refiero a la Iglesia.
De pequeña mi mamá fue adepta a al Iglesia. Una simpática damisela que iba demasiado seguido a misa. Creo que había sacado una sucripción de ostias, recibía las novedades parroquiales por mail y hasta se había reservado un lugar entre los bancos de adelante por 12 meses. Nefasto.
Esa agradable niña, un día conoció a mi padre. Ambos de religión cristiana pero mi padre sin ser un monaguillo (comparado con lo religiosa que era mi mamá). No tengo idea de qué onda ellos cuando yo no había nacido. Todavía no vi esa temporada de mi familia en "volver". Pero sí sé que cuando nacimos mi hermana y yo, la religión se impuso de esta forma: Uds serán bautizados, realizarán la comunión (que es tipo la secundaria de la Iglesia); y porque alguien nos dijo que era requisito para casarse de blanco: Hicimos la "Confirmación", que es tipo carrera de grado y posgrado. Creo que hasta tuve que hacer una tésis. Si no me equivoco se tituló: "Jesús nuestro Señor, ¿Herrero con cuchillo de palo o carpintero con lengua de plata?"
Y aún así, la Iglesia no me cabe para nada. Quizás porque la vieja puta e incogida que me daba las clases de comunión me decía "el gordo de atrás". O porque en la Confirmación me tenté y una monja casi me baja a tiros escondida detrás del confesionario con un Artic.
Lo que sí creo es que si entro a una Iglesia me prendo fuego en el acto. Se lo dije a mi mamá "Posta, tengo miedo de quemarme vivo. Me imagino que Jesús se va a caer de la cruz. El altar se va a resquebrajar y el cura me va a perseguir con una estaca. Me lo imagino al tipo despeinado, volando con su sotana por los aires y ojos rojos al grito de "IMPÍO! INFIEL!! TÚ!". Monjas! Que no caminan, sino que levitan, con cánticos sagrados intentando ahorcarme con Rosarios y las viejas palurdas que van todos los días riendo sin dientes con los ojos bizcos. ¿Es así? Porque hace bocha que no voy."
Le prometí a mi mamá ofrecer mi otra mejilla en mercado libre y empezar a blasfemar menos. Tratar bien a todo lo que YO considere "prójimo" y confesarme (delante de mi terapeuta). Hablar con DIOS no sé si tanto, pero sí que lo menciono seguido. Invoco su nombre y cuando lo hago no creo que sea en vano. Bendecir las fiestas, claro! Si hay fiesta, bendita sea. Robar no robo y respeto a mis padres. Desear a la mujer de mi prójimo, depende qué prójimo y qué mujer.
Y sí, me voy a casar por iglesia y de blanco. Ya sé hasta dónde me voy a comprar el vestido.
Amenei.
No. Me refiero a la Iglesia.
De pequeña mi mamá fue adepta a al Iglesia. Una simpática damisela que iba demasiado seguido a misa. Creo que había sacado una sucripción de ostias, recibía las novedades parroquiales por mail y hasta se había reservado un lugar entre los bancos de adelante por 12 meses. Nefasto.
Esa agradable niña, un día conoció a mi padre. Ambos de religión cristiana pero mi padre sin ser un monaguillo (comparado con lo religiosa que era mi mamá). No tengo idea de qué onda ellos cuando yo no había nacido. Todavía no vi esa temporada de mi familia en "volver". Pero sí sé que cuando nacimos mi hermana y yo, la religión se impuso de esta forma: Uds serán bautizados, realizarán la comunión (que es tipo la secundaria de la Iglesia); y porque alguien nos dijo que era requisito para casarse de blanco: Hicimos la "Confirmación", que es tipo carrera de grado y posgrado. Creo que hasta tuve que hacer una tésis. Si no me equivoco se tituló: "Jesús nuestro Señor, ¿Herrero con cuchillo de palo o carpintero con lengua de plata?"
Y aún así, la Iglesia no me cabe para nada. Quizás porque la vieja puta e incogida que me daba las clases de comunión me decía "el gordo de atrás". O porque en la Confirmación me tenté y una monja casi me baja a tiros escondida detrás del confesionario con un Artic.
Lo que sí creo es que si entro a una Iglesia me prendo fuego en el acto. Se lo dije a mi mamá "Posta, tengo miedo de quemarme vivo. Me imagino que Jesús se va a caer de la cruz. El altar se va a resquebrajar y el cura me va a perseguir con una estaca. Me lo imagino al tipo despeinado, volando con su sotana por los aires y ojos rojos al grito de "IMPÍO! INFIEL!! TÚ!". Monjas! Que no caminan, sino que levitan, con cánticos sagrados intentando ahorcarme con Rosarios y las viejas palurdas que van todos los días riendo sin dientes con los ojos bizcos. ¿Es así? Porque hace bocha que no voy."
Le prometí a mi mamá ofrecer mi otra mejilla en mercado libre y empezar a blasfemar menos. Tratar bien a todo lo que YO considere "prójimo" y confesarme (delante de mi terapeuta). Hablar con DIOS no sé si tanto, pero sí que lo menciono seguido. Invoco su nombre y cuando lo hago no creo que sea en vano. Bendecir las fiestas, claro! Si hay fiesta, bendita sea. Robar no robo y respeto a mis padres. Desear a la mujer de mi prójimo, depende qué prójimo y qué mujer.
Y sí, me voy a casar por iglesia y de blanco. Ya sé hasta dónde me voy a comprar el vestido.
Amenei.
Comentarios
me imaginé toda la situación jajaja
pienso igual, siempre crei q algo asi podria sucederme...
SIEMPRE TRATO DE IR VESTIDA DE ROJO. SEEEEH