Es así

Hoy en el trabajo, nos hicimos a un lado con un compañero (para conocerlo lean esto). Y nos dedicamos a contarnos algunas historias propias de sexo (sepso, para los amigos de Manteca al Techo!). Me quedo con ésta, que me contó él:

"Resulta que yo en una época salí con una pendeja de 16 años. La hice a imagen y semejanza. Y un día vamos al telo, nos metemos en el hidromasaje y después de un rato me la empieza a chupar. Yo me apoyo con las manos de los bordes mientras lo hace y en un momento como un boludo me resbalo. Me hundo y la mina sigue abajo del agua.

Cuando me reincorporo la veo que sale (mientras sigue dándole), pero por el agua que le chorrea por la cara me da la impresión de que está llorando de felicidad por el pete que me está haciendo y ahí FRRRRRÁAAAAA (se la llevó toda).

Después quedó y la tenía que hacer siempre."

Standing ovation.